En Gran Bretaña se fundó una campaña para recuperar los valores del pan, un pan de verdad; “Real Bread Campaign”.
Esta fue lanzada oficialmente al final del 2008, pero ya desde 1990 iba en aumento la comunidad de panaderos que se enfocaban en volver a procesos y técnicas de elaboración de cientos de años atrás.
Uno de sus objetivos es desmantelar el uso incorrecto de los términos como “masa madre”, “artesano” o “artesanía”, por parte de las empresas alimentarias que producen panes con procesos netamente industriales y coadyuvantes o aditivos para mejorar los productos (CBP: Chorleywood Bread Process), como atajo para reducir tiempo y poder cumplir con una demanda en cantidad y no en calidad, en pro de minimizar costo de producción y maximizar ganancia.
Y enfocarse en un pan de verdad, que se pueda explotar al maximo los cereales en aroma, sabor, textura, y su aporte nutritivo, usando fermentos naturales y/o mínimas cantidades de levaduras comerciales, periodos de fermentación larga, mayor presencia de harinas integrales, sin coadyuvantes o aditivos, y una de las últimas vertientes es el uso de harinas orgánicas, recién molidas, sin ningún aditivo.
No solo se debe cambiar el proceso en los obradores, si no también difundir la contribución de un verdadero pan artesanal como alimento, desmitificando que el pan es perjudicial para nuestra salud.
Este movimiento se ha extendido en: España, Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda, entre otros.
Los objetivos de la Real Bread Campaign son:
- Promover el consumo de pan auténtico: El pan real se elabora con harina, agua, levadura y sal. No contiene aditivos ni conservantes artificiales.
- Educar al público sobre los beneficios del pan real: El pan real es más nutritivo y sabroso que el pan industrial.
- Apoyar a los panaderos artesanales: La Real Bread Campaign apoya a los panaderos que elaboran pan con métodos tradicionales.
El pan real es importante por varias razones:
- Es más nutritivo: El pan real contiene más fibra, vitaminas y minerales que el pan industrial.
- Es más sabroso: El pan real tiene un sabor más complejo y auténtico que el pan industrial.
- Es mejor para la salud: El pan real no contiene aditivos ni conservantes artificiales que pueden ser perjudiciales para la salud.
- Es más sostenible: La producción de pan real es más sostenible que la producción de pan industrial.